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¿Qué es la hiperplasia benigna de próstata?

La hiperplasia prostática es el crecimiento benigno de la glándula prostática. Se trata de una patología muy frecuente que afecta al 40% de hombres a partir de los 50 años. El agrandamiento de la próstata alteraciones en el aparato génito-urinario, que pueden producir:

  • Dificultad para comenzar a orinar
  • Chorro de orina débil, o entrecortado durante la micción
  • Sensación vaciado incompleto
  • Necesidad de orinar con más frecuencia, tanto por el día como por la noche
  • Sensación de urgencia al ir a orinar
  • Pérdidas de orina antes de poder llegar al lavabo a orina

Además, si no se trata a tiempo, puede acabar provocando complicaciones como:

  • Sangrado
  • Infección
  • Formación de piedras en la vejiga
  • Alteración de la función renal
  • Requerir una sonda vesical

Todos estos factores se traducen en un deterioro de la calidad de vida del paciente, que obligan al tratamiento de esta patología benigna. En casos moderados, puede seguirse un tratamiento con fármacos. Sin embargo, en casos más graves, el tratamiento quirúrgico resulta la mejor solución.

Si le han diagnosticado un crecimiento benigno de próstata (HBP) y tiene indicación de operarse debe tener en cuenta algunos factores que influirán en la decisión de la técnica a elegir. Los siguientes son los más importantes:

  • El tamaño de su próstata.
  • El riesgo quirúrgico en función de las patologías asociadas de cada paciente.
  • La disponibilidad de los equipos necesarios para llevar a cabo los distintas técnicas quirúrgicas (no todos los centros disponen de toda la tecnología) y la experiencia de los cirujanos (no todos los urólogos dominan todas las técnicas).
  • Sus preferencias y valores personales. No existe un tratamiento ideal para todos los pacientes.
  • Las técnicas láser para el tratamiento quirúrgico de la HBP constituyen en la actualidad una opción consolidada, con importantes ventajas frente a las técnicas tradicionales.

Tipos de láser para el tratamiento quirúrgico de la hiperplasia benigna de próstata:

  • Fotovaporización XPS 180W (láser verde).
  • Enucleación prostática con láser de Holmio (HoLEP).

Ventajas de las técnicas láser respecto a las técnicas tradicionales:

  • Tiempo de ingreso muy corto.
  • Menos tiempos de sonda.
  • Prácticamente sin sangrado.
  • Menor tasa de transfusión.
  • Sin necesidad de incisiones.

¿Cuándo optar por una técnica láser?

Cualquier paciente es candidato, si tiene indicación quirúrgica, a ser intervenido mediante una de estas técnicas. Sin embargo, existen grupos de pacientes en los que está especialmente recomendado: aquellos de alto riesgo quirúrgico (por edad u otras patologías asociadas) y pacientes con anticoagulación (sintrom, xarelto..) o antiagregación (adiro, tromalyt…) activa.


¿Cómo elegir entre las distintas técnicas?

Siempre que se disponga de la tecnología y experiencia necesaria, el principal condicionante para inclinarnos por un tipo de láser es el tamaño de la próstata. La fotovaporización está indicada en pacientes con próstatas de hasta 70-80cc y la enucleación en próstatas de mayor tamaño (aunque en ocasiones se pueden tratar volúmenes menores)
Además, si por alguna razón necesitamos analizar el tejido prostático, nos deberemos decantar por la enucleación con láser de holmium, dado que la vaporización, al evaporar el tejido, no obtiene tejido al finalizar el procedimiento.

El Servicio de Urología del Hospital Universitario Quirónsalud Madrid pone a su disposición los profesionales y la tecnología necesaria, para que poder elegir la técnica láser que mejor se adapte a sus características