Inflamación y repercusión en el organismo
La inflamación crónica de bajo grano es un proceso complejo en el que la inflamación, como mecanismo de defensa y con propósito reparador, se mantiene por más tiempo del debido dando lugar a una disfunción en sí misma que facilita la aparición de algunas patologías crónicas como la obesidad, enfermedades gastrointestinales y autoinmunes.
La alimentación tiene un papel súper importante que puede afectar aumentando o disminuyendo el estado inflamatorio de nuestro organismo.
¿Qué alimentos son pro-inflamatorios?
- Los productos ultra procesados como la bollería, dulces, precocinados; harinas refinadas, grasas de mala calidad.
- El estilo de vida sedentario, consumo de alcohol, refrescos, tabaco, alteraciones del sueño, estrés, son factores que aumentan la inflamación.
¿Qué alimentos priorizar para llevar una alimentación antiinflamatoria?
- Grasas saludables: AOVE; frutos secos, semillas…
- Vegetales: frutas, verduras y hortalizas frescas de colores variados
- Pescados, priorizando el azul
- Huevo
- El ejercicio físico, llevar un estilo de vida activo, el descanso adecuado, gestión del estrés.