Caminar mucho tiempo con chanclas puede llevar a problemas en los pies, pues con este tipo de calzado los pies trabajan en exceso para mantener la estabilidad, generando mucha tensión en cada paso, por lo que "es aconsejable utilizar otro calzado si se va a andar durante más rato y así evitaremos la fascitis plantar", según han indicado Ismael LuqueEste enlace se abrirá en una ventana nueva, podólogo del Hospital Quirónsalud CórdobaEste enlace se abrirá en una ventana nueva.

El podólogo ha explicado que durante los meses del año con temperaturas más altas aumenta el uso de calzado abierto en general y de chanclas en particular, "que puede provocar en algunos casos la temida fascitis plantar". Se trata de un tejido grueso que une el hueso del talón con los dedos, siendo una estructura que ayuda a generar y estabilizar nuestro arco plantar. Las causas de su lesión pueden ser varias, siendo la más común el uso excesivo de este tipo de calzado, como lo demuestra el hecho de que el 65% de los casos diagnosticados de fascitis plantar en consulta podológica se producen en los meses posteriores al verano. Ismael Luque con una paciente en consulta.Imagen en alta resolución. Este enlace se abrirá mediante lightbox, puede haber un cambio de contextoIsmael Luque con una paciente en consulta.

El dolor de la fascitis plantar se localiza en el inicio del arco interno de los pies, se puede sentir en los primeros pasos del día o al incorporarse de un descanso prolongado. Así, es desaconsejable caminar en exceso con chanclas si queremos evitar esta patología. Las chanclas al estar sueltas provocan que el pie las intente agarrar con los dedos a cada paso, esto genera contracciones repetitivas de la musculatura flexora del pie y ayuda a generar deformaciones en los dedos como los dedos de garra, en mazo o en martillo.

El uso de las chanclas es adecuado en piscinas, playas y duchas con el fin de proteger la planta del pie pero si se van a realizar paseos prolongados, es recomendable el uso de calzado que esté bien sujeto al pie. En cualquier caso, si se nota algún tipo de dolor en los talones, no debe demorarse la vista al podólogo para evitar agravar el problema y tratarlo cuanto antes, ha destacado Ismael Luque.