La degeneración macular es una enfermedad ocular que afecta principalmente a las personas mayores y es una de las principales causas de pérdida de visión en aquellos mayores de 50 años. Aunque no se puede revertir el daño una vez que ocurre, la prevención es fundamental para ralentizar su progresión y, en muchos casos, evitar que se desarrolle. Adoptar medidas preventivas adecuadas puede ayudar a preservar la visión y mejorar la calidad de vida.
La Dra. Isabel Garabito, jefa del Servicio de oftalmología
del Hospital Ruber Internacional,
ofrece recomendaciones clave para prevenir la degeneración macular, tanto para quienes tienen antecedentes familiares como para aquellos que no.
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Doctora Isabel Garabito
La degeneración macular es una enfermedad que afecta la mácula, una pequeña área en el centro de la retina responsable de la visión central y detallada. Esta condición puede llevar a una pérdida significativa de la visión central, aunque la visión periférica generalmente permanece intacta. La degeneración macular es una de las causas más importantes de ceguera en personas mayores de 55 años. Se caracteriza por el deterioro gradual de la mácula, que a medida que progresa puede afectar la calidad de vida al dificultar actividades como leer, conducir y reconocer rostros.
Afortunadamente, existe evidencia científica que respalda la importancia de ciertas medidas preventivas para reducir el riesgo de degeneración macular y preservar la salud ocular. Estas medidas dependeran en parte de si la persona tiene o no antecedentes familares de Degeneración macular.
Antecedentes familiares y predisposición genética
Las personas con antecedentes familiares de degeneración macular tienen un mayor riesgo de desarrollar la enfermedad. Según la Dra. Garabito, "tener antecedentes familiares no significa que inevitablemente se desarrollará la enfermedad, pero es un factor de riesgo que requiere una atención más cuidadosa".
Veamos algunas de las medidas de prevención para toda la población:
La exposición a la luz ultravioleta (UV) puede dañar la mácula. La Dra. Garabito recomienda "usar gafas de sol que bloqueen los rayos UV siempre que estés al aire libre". Esto es crucial para proteger los ojos de los daños solares acumulativos.
El tabaquismo es un factor de riesgo significativo para la degeneración macular. "Dejar de fumar es una de las mejores cosas que puedes hacer por la salud de tus ojos", asegura la Dra. Garabito. Fumar no solo afecta la salud pulmonar y cardiovascular, sino que también daña los vasos sanguíneos en la retina.
Los antioxidantes ayudan a combatir el daño oxidativo en las células de la mácula. La Dra. Garabito sugiere "una dieta rica en frutas y verduras, especialmente aquellas con altos niveles de vitaminas A, C y E, y zinc". Los alimentos como zanahorias, cítricos, espinacas y frutos secos son excelentes opciones.
La obesidad puede aumentar el riesgo de desarrollar degeneración macular. "Mantener un peso saludable a través de una dieta equilibrada y ejercicio regular es esencial", aconseja la Dra. Garabito. El ejercicio no solo ayuda a mantener un peso adecuado, sino que también mejora la salud cardiovascular, lo cual es beneficioso para la salud ocular.
La hipertensión y el colesterol alto pueden afectar negativamente la circulación sanguínea en la retina. "Es importante mantener estos niveles bajo control con una dieta adecuada y, si es necesario, medicación", explica la Dra. Garabito. Una buena salud cardiovascular es crucial para una buena salud ocular.
Hacer ejercicio regularmente no solo es beneficioso para la salud general, sino que también puede ayudar a prevenir la degeneración macular. "El ejercicio mejora la circulación sanguínea y reduce el riesgo de enfermedades cardiovasculares, lo que a su vez beneficia la salud ocular", señala la Dra. Garabito. Actividades como caminar, nadar y practicar yoga pueden ser muy efectivas.
Las revisiones periódicas con un oftalmólogo pueden detectar cambios tempranos en la mácula. "Incluso si no tienes síntomas, es recomendable hacerse exámenes de la vista regularmente", dice la Dra. Garabito. Un diagnóstico temprano permite intervenciones rápidas que pueden ralentizar la progresión de la enfermedad.
Los antecedentes familiares juegan un papel importante en la degeneración macular asociada con la edad. Si tienes familiares que han experimentado esta afección, es crucial estar alerta y tomar medidas adicionales:
"Los suplementos que contienen antioxidantes y zinc pueden ser beneficiosos para las personas con alto riesgo", menciona la Dra. Garabito. Estos suplementos pueden ayudar a reducir el riesgo de progresión de la degeneración macular. Los estudios Los Estudios de Enfermedades Oculares Relacionadas con la Edad (AREDS1 y AREDS2)son investigaciones clínicas que han arrojado luz sobre la degeneración macular relacionada con la edad. En el AREDS1, se descubrió que una combinación específica de antioxidantes y zinc puede ayudar a reducir el riesgo de progresión de la Degeneración macular moderada a avanzada. Por otro lado, el AREDS2 exploró si agregar antioxidantes adicionales a la fórmula original proporcionaba beneficios extra. Los resultados indicaron que los suplementos AREDS2 pueden retrasar la pérdida de visión en personas con Degeneración macular intermedia o avanzada.
"Si tienes antecedentes familiares, deberías realizar exámenes de la vista con mayor frecuencia", aconseja la Dra. Garabito. Las personas con alto riesgo pueden necesitar revisiones oftalmológicas cada seis meses en lugar de anuales.
Reducir el tiempo frente a pantallas y asegurarse de que las condiciones de iluminación sean adecuadas cuando se lee o se trabaja puede ayudar a reducir el estrés en los ojos. "Es importante tomar descansos regulares para dar descanso a tus ojos", sugiere la Dra. Garabito.
En resumen, la prevención de la degeneración macular es posible mediante una combinación de hábitos de vida saludables y controles oftalmológicos regulares. Tanto si tienes antecedentes familiares como si no, seguir las recomendaciones de la Dra. Isabel Garabito puede ayudarte a mantener la salud de tus ojos y reducir el riesgo de desarrollar esta enfermedad debilitante.