Contaminación y asma


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La contaminación puede influir en el control del asma, directamente por su efecto sobre la vía aérea y por otra parte es capaz de aumentar la sensibilización a alergenos. Además, determinadas condiciones climáticas como el calor, tormentas, etc., pueden potenciar el efecto. Por ello los pacientes con asma deberían tener en cuenta algunas recomendaciones:


  • Evitar salir al exterior, en la medida de lo posible los días que exista un pronóstico de niveles altos de contaminación.
  • Evitar realizar ejercicio físico en estos ambientes.
  • Consultar los sistemas de alertas de contaminación.
  • Vivir a más de 300 m de una autopista.
  • Viajar en coche con las ventanas cerradas.
  • Como puede potenciar la acción de los alergenos, tener especial cuidado con la exposición durante las estaciones polínicas.