Tumores cerebrales, uno de los mayores desafíos de la neurología moderna
La detección temprana y un tratamiento adecuado pueden marcar la diferencia en la calidad de vida de los pacientes.

Los tumores cerebrales son crecimientos anormales de células dentro del cerebro. Pueden ser benignos o malignos, dependiendo de su comportamiento y agresividad y se clasifican según el tipo de célula de origen, como los gliomas, meningiomas, adenomas hipofisarios y tumores metastásicos, entre otros.
"Los gliomas son los tumores cerebrales primarios más frecuentes, representando entre el 30% y 40% de los casos, siendo el glioblastoma multiforme (GBM) el más agresivo de todos", explica el Dr. Jorge Torales, especialista en neurocirugía en el Hospital El Pilar y experto en tumores del ángulo pontocerebeloso como el neurinoma del acústico.
"Los meningiomas, que provienen de las meninges, constituyen entre un 30% y 35% de los casos y suelen ser benignos.
"También existen los adenomas hipofisarios, que afectan la producción hormonal, y los tumores metastásicos, que provienen de otros órganos". La gravedad de cada tumor depende de su ubicación, velocidad de crecimiento y la respuesta al tratamiento.
¿Cómo se diagnostican y se tratan los tumores cerebrales?
El proceso de diagnóstico -explica el especialista- comienza con la evaluación de los síntomas, que pueden incluir dolor de cabeza persistente, crisis epilépticas, alteraciones en la audición o el equilibrio y cambios en la memoria o el comportamiento. Posteriormente, se realizan pruebas de imagen como resonancia magnética (RM), que es la más precisa, o tomografía computarizada (TC) en casos de urgencia y, en algunos casos, se recurre a una biopsia cerebral para obtener un diagnóstico definitivo. "El tratamiento depende del tipo, tamaño y ubicación del tumor, así como del estado general del paciente", explica el Dr. Torales.
Las principales opciones terapéuticas incluyen la cirugía, la radioterapia y la quimioterapia. Existen muchos tumores cerebrales donde se puede plantear el seguimiento clínico y radiológico, generalmente con resonancia magnética, esto como en meningiomas y neurinomas del acústico pequeños y asintomáticos.
La cirugía por craneotomía, es la primera línea de tratamiento en la mayoría de los casos. Utilizamos la neuronavegación, que actúa como un "GPS" en la cirugía, permitiendo mayor precisión y seguridad", explica el Dr. Torales. "Y también contamos con la opción de cirugía endoscópica y la técnica con paciente despierto para minimizar riesgos en zonas críticas del cerebro".
Otra opción de tratamiento es la radioterapia, que se emplea en tumores inoperables, como tratamiento complementario tras la cirugía, o para reducir el riesgo de recidiva.
Por último, la quimioterapia: está indicada en ciertos tipos de tumores, como los gliomas, y se utiliza en combinación con otros tratamientos para mejorar los resultados.
"En los últimos años, la tecnología ha revolucionado el tratamiento de los tumores cerebrales. Herramientas como la neuronavegación, la cirugía endoscópica y la radiocirugía han permitido procedimientos más seguros y menos invasivos. Además, los estudios genéticos ayudan a personalizar los tratamientos según las características del tumor", afirma el especialista del Hospital El Pilar.
Causas y posibles medidas preventivas
Si bien la causa exacta de los tumores cerebrales aún no se conoce con certeza, existen algunos factores de riesgo identificados, como la exposición a radiaciones ionizantes y antecedentes familiares relacionados con algunos tipos de tumores. Sin embargo, un estilo de vida saludable es recomendable, evitar el consumo de tabaco y alcohol en exceso, reducir la exposición a radiaciones innecesarias, mantener una actividad física regular, gestionar el estrés y mantener una buena calidad del sueño.
"El diagnóstico de un tumor cerebral puede ser aterrador, pero es importante saber que los avances en neurocirugía y oncología han mejorado significativamente el pronóstico. La detección temprana y un tratamiento multidisciplinario son clave para ofrecer mejores resultados y calidad de vida a los pacientes. Ante cualquier síntoma neurológico persistente, lo recomendable es acudir a un especialista para una evaluación oportuna.", insiste el especialista en neurocirugía.