Ecografía automática de mama (ABUS)

La ecografía automática de mama está especialmente pensada para obtener imágenes de mamas densas. Con esta tecnología se consigue un diagnóstico precoz y más preciso de los tumores cancerosos.

Ecografía automática de mamaEcografía automática de mama

La ecografía automática de mama, o ABUS (Automatic Breast Ultra Sound), utiliza ultrasonidos para obtener imágenes en 3D sin que el personal sanitario se encargue de captarlas. Esta tecnología está especialmente indicada para mamas densas en las que el volumen de tejido mamario es muy superior al de grasa, ya que si hay un tumor puede no detectarse en las ecografías convencionales.

El sistema ABUS ofrece una mayor precisión diagnóstica, ya que el transductor de 15 centímetros (los tradicionales tienen 3 centímetros) se adapta a la forma de la mama y ofrece una imagen completa del volumen mamario.

Al generar imágenes tridimensionales, la ecografía automática de mama facilita el análisis desde diversos ángulos. Además, el especialista puede estudiarlas de forma interactiva a posteriori para llegar a un diagnóstico más preciso.

¿Cómo funciona?

El proceso de toma de imágenes de la tecnología ABUS es el mismo que en las ecografías convencionales: el transductor emite ondas sonoras de alta frecuencia que, al impactar sobre las estructuras internas del cuerpo, rebotan produciendo ecos. El transductor recoge estos ecos y un programa informático los traduce en imágenes que se presentan en escala de grises.

En una ecografía automática de mama, la paciente se coloca boca arriba y se introduce el pecho en un cabezal ergonómico, que se adapta a la forma del seno. El transductor recorre toda la superficie mamaria de forma automática.

¿Cuáles son los beneficios de la ecografía automática de mama?

Los beneficios más destacados de la tecnología ABUS son:

  • Estudio de todo el volumen mamario.
  • Imágenes en tres dimensiones con visión general de toda la mama.
  • Localización automática de lesiones e información precisa de su ubicación.
  • Diagnóstico más preciso en mamas densas.
  • Facilidad en la planificación de cirugías, ya que reproduce la posición del paciente en el quirófano.
  • Toma de imágenes automática, sin intervención manual.
  • Prueba diagnóstica sin radiación.
  • Permite una doble lectura de las imágenes.
  • Posibilidad de procesar las imágenes.

¿Cuándo está indicada?

La ecografía automática de mama es de gran utilidad en mujeres menores de 40 años, en las que la mamografía no está indicada de forma generalizada, y en aquellas que tienen una mama densa, es decir, con mayor cantidad de tejido fibroso que de glándulas de grasa.

Qué esperar de una ecografía automática de mama

La ABUS es una técnica indolora que se lleva a cabo de forma ambulatoria. Es normal sentir la presión de la membrana que se coloca en el transductor, pero solamente produce un ligero dolor en mamas muy sensibles.

Para someterse a la prueba, la paciente se desnuda de cintura para arriba y se tumba en una camilla boca arriba. El personal sanitario aplica un gel sobre la mama para evitar que se formen bolsas de aire y favorecer que las imágenes sean más nítidas. Después, se coloca el brazo hacia arriba y se introduce el pecho en el interior del transductor, que se adapta a su forma porque es ergonómico.

El procedimiento de una ecografía automática de mama dura alrededor de 15 minutos.

Especialidades en las que se utiliza

La ecografía automática de mama se lleva a cabo por especialistas en radiología a petición de oncología o ginecología.

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