¿Cuál es el objetivo?

La obesidad es una enfermedad compleja y multifactorial en la que influyen los factores relacionados con el estilo de vida. El sedentarismo junto a otros malos hábitos alimentarios y factores endocrino-metabólicos y genéticos, suponen en muchas ocasiones grandes trabas para los pacientes.

El exceso de peso suele producir:

  • Mala coordinación.
  • Problemas de equilibrio.
  • Falta de movilidad o movilidad limitada.
  • Aislamiento y problemas sociales.
  • Dificultades respiratorias.

Beneficios del ejercicio físico:

  • Aumenta el gasto energético.
  • Ayuda a controlar el apetito y reduce la ingesta calórica.
  • Mejora el perfil metabólico.
  • Disminuye la aparición o progresión diabetes tipo 2.
  • Control y reducción de la hipertensión arterial.
  • Reducción del colesterol LDL y triglicéridos.
  • Aumento del colesterol HDL.
  • Aumento de la densidad ósea.
  • Mejora de la capacidad respiratoria.
  • Mejora de la autoestima y la calidad de vida.
  • Ayuda a combatir la ansiedad y el estrés.
  • Mejora la eficacia del sistema inmune.
  • Ayuda al mantenimiento de peso a largo plazo.
  • Mejora la fuerza y función muscular.
  • Reduce la inflamación crónica de bajo grado vinculada a la obesidad.
  • Mejora la calidad del colágeno articular.
  • Incrementa la resistencia de tendones.
  • Reduce la grasa visceral.