Úlceras en el pie
¿Por qué aparecen úlceras en los pies? Toda la información sobre las causas, los síntomas y los tratamientos para este trastorno.
Síntomas y causas
Las úlceras en el pie son lesiones cutáneas localizadas en el pie que implican la pérdida total de la epidermis y parte de la dermis e incluso la hipodermis: se produce una ruptura en la piel que produce una herida abierta que no se cura.
Las úlceras del pie se clasifican en función de su causa:
- Úlceras vasculares: están causadas por un trastorno circulatorio. Según los vasos sanguíneos responsables, pueden ser:
- Úlceras venosas o de estasis: se presentan frecuentemente en la zona alrededor del tobillo.
- Úlceras arteriales o isquémicas: suelen aparecer en los dedos de los pies o en el talón.
- Úlceras neuropáticas: se deben a una lesión nerviosa.
- Úlceras por presión o escaras: debidas a la presión constante sobre la piel. Suelen aparecer en la planta del pie, especialmente el talón.
Síntomas
La sintomatología de la úlcera varía en función del tipo:
- Síntomas de úlceras venosas:
- Llagas superficiales de coloración roja.
- Bordes irregulares y ligeramente elevados.
- Piel circundante rojiza, brillante y caliente.
- Supuración y exudado abundante.
- Dolor.
- Eccema.
- Picor.
- Síntomas de úlceras arteriales:
- Llagas profundas de coloración gris amarillento.
- Costra necrótica.
- Bordes regulares y afilados.
- Piel circundante pálida, seca y fría.
- Sin exudado.
- Dolor intenso.
- Síntomas de úlceras neuropáticas:
- Forma inicial similar a una hiperqueratosis(callo o dureza).
- Posteriormente, presenta una úlcera central profunda con forma redondeada.
- Secreción purulenta.
- No es dolorosa, debido a la pérdida de sensibilidad por el daño neuropático.
- Aumento progresivo de tamaño.
- Destrucción de los tejidos circundantes.
- Síntomas de úlceras por presión:
- Inflamación.
- Ampolla, en la fase inicial.
- Llaga profunda de coloración marrón rojizo.
- Supuración.
Causas
Las úlceras vasculares tienen que ver con problemas circulatorios. Las úlceras venosas se producen por una disminución del retorno venoso de la sangre causado por daños u obstrucciones en las venas que hacen que la sangre se acumule. Las úlceras arteriales se deben a la falta de riego sanguíneo al pie derivado principalmente del estrechamiento de las arterias.
Las úlceras por presión también vienen de una disminución del riego sanguíneo, pero en este caso es causada por un exceso de presión o fricción ejercido sobre los pies. Las úlceras neuropáticas, por su parte, se deben a lesiones de los nervios periféricos habitualmente relacionadas con la diabetes.
Factores de riesgo
Las probabilidades de padecer úlceras en el pie aumentan en estas situaciones:
- Enfermedades vasculares, como tromboflebitis, trombosis venosa profunda, arteriosclerosis, enfermedad arterial periférica o vasculitis.
- Diabetes.
- Higiene inadecuada.
- Obesidad.
- Embarazo.
- Desnutrición y deshidratación.
- Tabaquismo.
- Situaciones de inmovilidad.
- Pérdida de sensibilidad y de percepción sensorial.
Complicaciones
Las úlceras en el pie, cuando no son tratadas, pueden ampliarse e infectarse. La infección puede extenderse, atravesar la piel y afectar a los huesos, las articulaciones o los tejidos blandos, causando trastornos como celulitis infecciosa, osteomielitis o artritis séptica. Asimismo, en raras ocasiones, puede llegar a producirse una septicemia, una respuesta desregulada del organismo ante la infección que puede ocasionar un daño orgánico múltiple y suponer un riesgo para la vida.
Además, la falta de riego en el pie puede causar la muerte de los tejidos (necrosis), produciendo una gangrena que, en casos graves, puede requerir una amputación.
Prevención
Entre las medidas de prevención de las úlceras del pie se encuentran:
- Higiene exhaustiva de los pies.
- Mantener la piel seca e hidratada.
- Cuidado de las uñas.
- Inspección diaria de los pies, prestando especial atención al talón, la planta y la zona interdigital.
- En diabéticos: mantener un buen control del azúcar (glucemia).
- Uso de calcetines de fibras naturales y que no aprieten.
- Uso de calzado que se ajuste correctamente, sin ejercer presión ni roce.
¿Qué médico trata las úlceras en el pie?
Las úlceras en el pie se evalúan y tratan en la consulta de especialistas en Dermatología Médico-Quirúrgica y Venereología, Medicina Familiar y Comunitaria, Medicina de la Educación Física y el Deporte o Angiología y Cirugía Vascular.
Diagnóstico
Las pruebas habituales en el diagnóstico de las úlceras del pie incluyen:
- Exploración física: evaluación de la morfología de la úlcera, de la sensibilidad en la zona y del historial clínico del paciente, para identificar el tipo de úlcera y su causa.
- Análisis de sangre, para medir los niveles de azúcar y buscar marcadores de infección.
- Pruebas para evaluar el flujo y la presión sanguíneas:
- Ecografía DopplerEcografía DopplerEcografía venosa-arterial: las imágenes por ultrasonidos permiten identificar anomalías en los vasos sanguíneos que puedan ser responsables de las úlceras.
- Índice tobillo-brazo: se compara la tensión medida en el tobillo con la medida en el brazo para determinar si existe una disminución del flujo sanguíneo en las extremidades inferiores.
- Cultivos microbiológicos: se toma una muestra de la úlcera para cultivarla en el laboratorio y observar la presencia de microorganismos.
Tratamiento
El tratamiento curativo de una úlcera en el pie implica varios pasos:
- Limpieza diaria de la úlcera con agua, jabón y suero fisiológico, eliminando restos de exudado o de tejido necrótico (desbridamiento). Se pueden aplicar soluciones antisépticas, hidrogeles autolíticos o apósitos hidroactivos.
- Colocación de apósitos no oclusivos para proteger la úlcera.
- Intervención quirúrgica para drenar y desbridar la úlcera, si esta no mejora.
- Administración de antibióticos para combatir la infección.