Uña encarnada

La uña encarnada (onicocriptosis), también conocida como uña incarnata, es una afección que se produce por el roce continuo de la uña en el pliegue lateral de uno de los dedos del pie (normalmente, el dedo gordo pie). Como consecuencia, la zona se inflama, se enrojece y causa dolor. En definitiva, se trata de una uña que crece dentro de la piel, en lugar de sobre ella como es habitual, lo cual origina inflamación, infección secundaria, dolor al caminar o ante pequeños traumas y en ocasiones formación de tejido de granulación.

A pesar de que puede darse en todo tipo de personas, la uña encarnada es muy habitual entre niños y adolescentes.

Por norma general, la onicocriptosis se puede curar tratar en casa siguiendo las recomendaciones del médico, pero hay casos que se complican en los que es necesario realizar una intervención quirúrgica.

Síntomas

Los síntomas más característicos de la uña encarnada son:

• Dolor.
• Enrojecimiento.
• Inflamación.
• Infección y aparición de pus.
• En ocasiones, limitación del movimiento.

Causas

La uña incarnata puede producirse por diferentes causas como:

• Sufrir traumatismos en el dedo.
• Llevar calzado demasiado estrecho.
• Cortar las uñas en exceso o en forma redondeada (deben ser rectas).
• Tener las uñas curvas.
• Practicar un deporte que fomente el roce de la uña.
• Padecer una infección en las uñas.

Factores de riesgo

Algunos de los factores que predisponen ante la uña encarnada son:

• Tener las uñas curvas o con formas especiales.
• Ser adolescente, ya que aumenta la transpiración de los pies y las uñas se vuelven más blandas.
• No cuidar las uñas adecuadamente. Por ejemplo, cortarlas demasiado.
• Utilizar calzado que apriete los dedos.
• Practicar deportes que puedan afectar a las uñas.
• Padecer diabetes, ya que el riego sanguíneo puede no ser el adecuado.

Complicaciones

Cuando la onicocriptosis no se trata adecuadamente o se padece diabetes, puede derivar en complicaciones graves como:

• Infección en el dedo.
• Formación de espículas en la uña, es decir, el borde de la lámina ungueal se clava en la piel.
• Inflamación crónica.
• Fibrosis del rodete periungueal: aumento del tejido fibroso del borde lateral del dedo

Prevención

Se puede prevenir la uña encarnada teniendo en cuenta las siguientes recomendaciones:

• Llevar las uñas con un largo adecuado, es decir, a la altura de la punta de los dedos.
• Cortar las uñas en línea recta.
• Utilizar calzado que se ajusten al pie sin apretar los dedos.
• Usar la protección adecuada para practicar deportes en los que las uñas puedan recibir impactos o roces continuos.
• Revisar el estado de los pies y de las uñas frecuentemente, en especial, cuando se tiene diabetes.

¿Qué médico trata la uña encarnada?

Los especialistas en Podología, Cirugía General y del Aparato Digestivo y Cirugía Pediátrica son expertos en el tratamiento de la uña incarnata.