Plagiocefalia
Información sobre las causas, la prevención, el pronóstico y el tratamiento de la cabeza plana en los bebés.
Síntomas y causas
La plagiocefalia es la malformación de la cabeza del recién nacido causada por una presión externa. El cráneo se aplasta, generalmente en la zona posterior o lateral, y provoca asimetría facial debido a la postura mantenida en el interior del útero o la preferencia del bebé para dormir. Por este motivo, también se conoce como plagiocefalia posicional.
A pesar de lo que pueda parecer, la plagiocefalia no supone un retraso en el desarrollo intelectual. Aun así, si no se corrige por sí sola en las primeras semanas de vida, se debe tratar para evitar complicaciones y problemas estéticos.
El pronóstico de la plagiocefalia es bueno, ya que el cráneo de los bebés es moldeable y, al igual que se deforma por un apoyo continuado, puede recuperarse con relativa facilidad.
Síntomas
Los síntomas característicos de la plagiocefalia son:
- Deformidad del cráneo.
- Menos cantidad de pelo en la zona aplastada.
- Deformidad facial.
- Una oreja ligeramente más adelantada que la otra.
- En algunos casos, contractura de los músculos del cuello.
Causas
La plagiocefalia puede deberse a alguna de estas causas:
- Posición intrauterina: cuando el feto no se mueve mucho durante la gestación y permanece con la cabeza pegada a la pared del útero, el bebé puede nacer con plagiocefalia.
- Proceso de parto: cuando el paso por el canal del parto es complicado, la presión excesiva puede producir un aplanamiento temporal del cráneo del recién nacido.
- Postura al dormir: la Asociación Española de Pediatría (AEP) recomienda que los menores de un año duerman boca arriba para reducir el riesgo de muerte súbita del lactante y los bebés duermen muchas horas al día, por lo que los huesos blandos y flexibles de los recién nacidos tienden a aplastarse en la zona sobre la que permanecen más tiempo apoyados. Además, la parte posterior de la cabeza se apoya también al ir en el coche de paseo o en la silla de seguridad para vehículos.
- Tortícolis: los músculos del cuello están contracturados (unas veces por la posición en el útero y otras por patologías congénitas), por lo que es más difícil que los bebés muevan la cabeza y se mantienen siempre en la misma postura.
Factores de riesgo
El riesgo de plagiocefalia aumenta en estos casos:
- Gestación múltiple.
- Feto con la cabeza grande.
- Útero pequeño.
- Exceso o defecto de líquido amniótico.
- Presentación de nalgas.
- Prematuridad, ya que los huesos son más débiles.
- Estancia prolongada en la incubadora.
Complicaciones
Si no se corrige a tiempo, la plagiocefalia puede acarrear complicaciones severas:
Problemas de salud mental: las asimetrías faciales y craneales pueden afectar su autoestima y la imagen corporal, lo que podría derivar en problemas psicológicos o de salud mental.
- Retrasos neurológicos que dificulten el desarrollo cognitivo y psicomotor.
- Problemas de visión por la desalineación de los ojos, que dificulta la visión binocular.
- Problemas de audición causados por un estrechamiento de los canales de drenaje que dificulta el drenaje de líquidos.
- Dificultad para hablar y alteración del lenguaje.
- Alteraciones de la mordida.
Prevención
La plagiocefalia intrauterina o por tortícolis no se puede prevenir. Para evitar el síndrome de la cabeza plana en los bebés recién nacidos se recomienda:
- Girar levemente la cabeza del niño cada cierto tiempo mientras está en la cuna.
- Cambiar la orientación de la cuna mientras está despierto para que reciba estímulos desde distintos lados.
- Pasar tiempo boca abajo mientras está despierto.
- Alternar el coche de paseo con el porteo para aliviar la presión sobre el cráneo.
¿Qué médico trata la plagiocefalia?
La plagiocefalia se detecta en la consulta de pediatría. En el tratamiento intervienen especialistas en neurología o cirugía ortopédica y traumatología.
Diagnóstico
La plagiocefalia se diagnostica mediante la observación de la cabeza del bebé y no suele ser necesario hacer pruebas complementarias.
Tratamiento
En la mayoría de los casos, la plagiocefalia se corrige por sí misma con el paso del tiempo y cuando se siguen las recomendaciones indicadas para prevenir su aparición. Si el cambio de posturas o el porteo no mejoran la situación, se utiliza un casco personalizado para corregir la forma del cráneo más rápidamente. La edad recomendada para este tratamiento es entre los cuatro y los ocho meses, ya que a partir de esta edad el cráneo crece menos y tiene mayor capacidad de remodelarse por sí mismo.
En primer lugar, se toman las medidas exactas de la cabeza del bebé, ya sea con un molde de escayola o con un escáner 3D. Con esta información, se fabrica una órtesis que queda suelta en la zona aplanada y ajustada en las partes de la cabeza sin deformidad. Este casco, que consta de una capa exterior rígida y una interior acolchada, redirige el crecimiento del cráneo hacia la zona aplastada.
En los casos de tortícolis, se trata con ejercicios de estiramiento para fortalecer los músculos del cuello y mejorar la flexibilidad.


































































































