Ecografía 4D
La ecografía 4D ofrece imágenes tridimensionales en movimiento del interior del cuerpo humano. Suele utilizarse durante el embarazo para ver los rasgos faciales del feto, pero también proporciona información precisa sobre tumores cancerosos en pacientes de riesgo.

Descripción General
La ecografía 4D es una técnica avanzada que permite obtener imágenes tridimensionales en movimiento. Para ello, utiliza ondas de ultrasonido que, al chocar contra los tejidos, emiten un eco que el ordenador conectado al ecógrafo puede traducir en imágenes.
Es habitual que se utilice en el segundo trimestre del embarazo para observar los movimientos y los rasgos faciales del feto, la forma y los movimientos del futuro bebé en tiempo real y sus rasgos faciales así como para detectar posibles malformaciones. Fuera del campo de la obstetricia, también es una herramienta útil en oncología para analizar la estructura de los vasos sanguíneos y detectar tumores cancerosos en sus fases iniciales.
¿Cuándo está indicada?
Se recomienda hacer una ecografía fetal en 4D en la semana 27 o 28 de gestación, momento en el que la cantidad de líquido amniótico es óptima para obtener las imágenes y los rasgos del feto suelen ser más parecidos a los de un recién nacido.
También se lleva a cabo en pacientes de riesgo oncológico con resultados negativos en otras pruebas de diagnóstico por imagen, para obtener imágenes con mayor detalle.
¿Cómo se realiza?
La ecografía 4D se hace mediante el mismo procedimiento que una eco convencional. Es decir, aplicando un gel acuoso sobre la piel que facilita la obtención de las imágenes y colocando encima una sonda (transductor)que genera el ultrasonido y, a su vez, recoge el eco que se produce cuando las ondas chocan con los tejidos. Este aparato se desliza sobre la superficie a estudiar.
Riesgos
Someterse a una ecografía 4D no supone ningún riesgo para la salud.
Qué esperar de una ecografía 4D
Este procedimiento se hace con el paciente tumbado sobre una camilla con la zona que se va a estudiar descubierta, por lo que es posible que se facilite una bata en el centro médico.
La aplicación del gel puede provocar una ligera sensación de frío que se pasa en poco tiempo. A veces, puede resultar incómodo el momento en el que el especialista presiona en algún punto para obtener una imagen mejor, pero no es una prueba dolorosa.
Para evitar que el feto permanezca quieto, se recomienda llevar algún alimento dulce, como una onza de chocolate, para fomentar el movimiento durante la prueba.
Este tipo de ecografías son ambulatorias y duran entre 10 y 15 minutos. Cuando se realizan durante el embarazo, las imágenes se ven y se explican durante la exploración. Además, se capturan algunas fotografías para que los padres se las puedan llevar. En los casos de exploración oncológica, los resultados se facilitan unos días después en la consulta.
Especialidades en las que se solicita una ecografía 4D
Las ecografías 4D son muy útiles en las especialidades de oncología y ginecología y obstetricia.
Cómo prepararse
No es necesaria ninguna preparación previa para hacer una ecografía 4D