Quirónsalud, pionero en la Isla en operar tiroides con neuromonitorización para evitar lesiones

Los doctores Julio Jordán (i) y Juan Manuel Sánchez (d) (1)Los hospitales Quirónsalud Tenerife y Quirónsalud Costa Adeje ya realizan con éxito una técnica quirúrgica, que no se emplea en ningún otro centro privado de la isla, con la que se reduce considerablemente el riesgo de posibles lesiones nerviosas en las cirugías de tiroides y paratiroides.

Los especialistas en Cirugía General y Digestiva Julio Jordán y Juan Manuel Sánchez han sido los encargados de implementar esta técnica en los dos hospitales del Grupo Quirónsalud en la isla y aseguran que esta supone un gran avance tecnológico que ha mejorado considerablemente los resultados de esta cirugía ya que, al permitir una mejor identificación visual de las estructuras anatómicas durante la intervención, disminuye la tasa de complicaciones.

La gran diferencia entre esta nueva técnica y la tradicional es que permite a los cirujanos vigilar y monitorizar en el mismo quirófano las terminaciones nerviosas de las cuerdas vocales. "Lo más importante es que el uso de esta técnica, en el caso de las operaciones de tiroides y paratiroides, permite minimizar el riesgo durante la intervención de dañar los nervios laríngeos, que son los responsables del movimiento de las cuerdas vocales y que, al estar en el cuello y muy próximos a las glándulas endocrinas, pueden verse afectados.", asegura el doctor Sánchez, para luego explicar que se trata de un sistema tecnológico de seguimiento que ya se aplica en otras especialidades quirúrgicas, aunque es la primera vez que se emplea en cirugía endocrina cervical en un hospital privado de Tenerife.

El especialista explica que a través del tubo endotraqueal que se utiliza para anestesiar al paciente se coloca un sensor situado a la altura de las cuerdas vocales; que es capaz de captar la respuesta del nervio al estímulo eléctrico al que es sometido durante toda la intervención. "De esta forma, continúa, los cirujanos somos capaces de tener localizados y controlados los nervios durante toda la intervención y así evitar dañarlos y, con ello, eludir una de las principales complicaciones de esta cirugía, que es, entre otras, la ronquera", concluye.