Cataratas
¿En qué consiste la operación de cataratas? Información sobre las causas, los síntomas y el tratamiento para este problema visual.
Síntomas y causas
Las cataratas se producen cuando el cristalino, normalmente transparente, se vuelve opaco. Como consecuencia, la visión se vuelve borrosa y se deteriora notablemente. El cambio de opacidad suele ser una consecuencia natural del paso del tiempo, ya que el cristalino pierde paulatinamente su capacidad de enfoque.
Dependiendo de su naturaleza, se habla de tres tipos diferentes de cataratas:
- Catarata nuclear: es la más habitual. Afecta a la parte central del cristalino, que se vuelve amarillenta e, incluso, de color marrón. Suele comenzar a formarse a partir de los 50 años y se desarrolla por completo a los 70 o 75.
- Catarata cortical: aparece en los bordes del cristalino. Suele presentarse en forma de líneas blanquecinas en el exterior que, con el tiempo, se extienden hacia la parte central e impiden ver correctamente.
- Catarata subcapsular posterior: se desarrolla en la parte posterior del cristalino, en medio de la trayectoria de la luz hacia el interior del ojo. Es más habitual en personas jóvenes, que manifiestan deslumbramientos o dificultad para ver adecuadamente con luz brillante.
La alteración visual causada por las cataratas se produce paulatinamente, por lo que, en un principio, puede corregirse con el uso de gafas. Cuando su evolución impide llevar una vida normal, se debe recurrir a la cirugía para eliminarlas.
Síntomas
Los principales síntomas de las cataratas son:
- Visión borrosa o nublada.
- Fotosensibilidad.
- Percepción alterada de los colores, normalmente se aprecian con menos intensidad.
- Halos de luz.
- Deslumbramiento.
- Mayor dificultad para ver de lejos.
Causas
A pesar de que suelen estar causadas por el paso del tiempo, las cataratas pueden desarrollarse por otros motivos:
- Catarata senil: es la más habitual y se debe al envejecimiento natural del ojo.
- Catarata traumática: está provocada por una lesión o como consecuencia de una cirugía.
- Catarata por radiación: causada por la exposición a radiación ionizante.
- Catarata congénita: se puede manifestar en el momento del nacimiento o desarrollarse durante la infancia. Puede deberse a causas genéticas, a traumatismos o a infecciones contraídas durante la gestación.
Factores de riesgo
Los principales factores que aumentan las probabilidades de sufrir cataratas son:
- Envejecimiento.
- Diabetes.
- Tabaquismo.
- Consumo excesivo de alcohol.
- Hipertensión.
- Traumatismos.
- Cirugía ocular.
- Exposición a radiación.
- Tratamientos prolongados con corticoides.
Complicaciones
Si las cataratas no se tratan adecuadamente, se corre el riesgo de perder la visión por completo. No obstante, este tipo de ceguera es reversible en la mayoría de los casos, ya que puede corregirse mediante cirugía.
Prevención
No se conoce una forma de prevenir la formación de cataratas. No obstante, para detectarlas a tiempo, se recomienda:
- Acudir regularmente a las revisiones oftalmológicas.
- Dejar de fumar.
- Reducir el consumo de alcohol.
- Llevar una dieta saludable.
¿Qué médico trata las cataratas?
Las cataratas son diagnosticadas y tratadas por especialistas en Oftalmología. Los profesionales en Medicina Familiar y Comunitaria o Geriatría también pueden detectarlas.
Diagnóstico
Las cataratas pueden diagnosticarse durante un examen oftalmológico de rutina. Entre las pruebas que suelen realizarse, se encuentran:
- Examen con lámpara de hendidura: permite observar detalladamente las partes del ojo. Basta con colocar la mandíbula en el soporte y mirar la luz que aparece en el interior del aparato sin parpadear.
- Examen de retina: se utilizan gotas dilatantes para observar el estado de la retina y las características de la catarata.
Tratamiento
El único tratamiento para las cataratas es la cirugía, ya que no existen medicamentos que ayuden a disolverlas o a ralentizar su crecimiento. El procedimiento más habitual es la facoestimulación, durante el que se utilizan ultrasonidos para descomponer la catarata y, posteriormente, extraerla junto con el cristalino a través de una pequeña incisión. Finalmente, se coloca una lente intraocular que puede llevar graduación cuando es necesario.
Para llevar a cabo la operación de cataratas no es necesario someterse a anestesia general, ya que se utilizan gotas anestésicas que solamente reducen la sensibilidad del ojo. Se trata de una cirugía que dura unos 15 minutos y suele realizarse en días diferentes para cada ojo.
El tiempo de recuperación varía de unas personas a otras, aunque la mayoría ven nítidamente pocas horas después de la intervención. Durante el postoperatorio conviene no realizar movimientos bruscos ni esfuerzos físicos, y se deben utilizar colirios antiinflamatorios.