Geriatría
Te contamos todo lo que necesitas saber sobre la especialidad de geriatría: qué estudia, qué enfermedades trata, en qué consiste la atención geriátrica o cuáles son sus principales técnicas y métodos diagnósticos. Solicita tu consulta en uno de nuestros hospitales.

¿Qué es la geriatría?
La geriatría es la rama de la medicina que trata a mayores de 65 años. Esta especialidad realiza un abordaje integral para cubrir todas las necesidades de los pacientes, velar por su bienestar y mejorar su calidad de vida.
Los geriatras tienen como objetivo principal prevenir, diagnosticar y tratar las afecciones derivadas del envejecimiento desde un punto de vista funcional, mental y social. En sus planteamientos se incluye siempre la participación, y el asesoramiento cuando es necesario, de los familiares del paciente.
¿Qué estudia la geriatría?
El campo de estudio de la geriatría es muy amplio, ya que se centra en las enfermedades propias de las personas mayores y que, por lo tanto, pueden afectar a cualquier órgano del cuerpo humano. Además, las afecciones que provoca el paso del tiempo pueden repercutir en diversos aspectos, como el biológico, el psicológico, el cultural y el social. Por este motivo, es habitual que los geriatras trabajen de forma conjunta con otros médicos y que se especialicen en diferentes áreas, entre las que destacan:
- Geriatría general: se ocupa de personas mayores con enfermedades crónicas o que presentan más de una patología y que necesitan llevar a cabo varios tratamientos a la vez.
- Ortogeriatría: centrada en el cuidado de pacientes geriátricos con rotura de cadera.
- Cardiogeriatría: se encarga de las patologías del corazón y de los trastornos cardiovasculares habituales en personas de edad avanzada.
- Oncogeriatría: más de la mitad de los nuevos cánceres que se diagnostican al año están presentes en personas mayores. Por lo tanto, esta especialización resulta fundamental para tratar cada caso de forma personalizada y de acuerdo con las necesidades concretas de la vejez.
¿A qué pacientes está dirigida?
Los pacientes que trata la geriatría son mayores de 65 años. Los efectos del paso del tiempo hacen que sea habitual que presenten una o varias enfermedades. No obstante, muchas de las personas que acuden a la consulta enferman de forma puntual y solo presentan la degeneración propia de la edad, por lo que la prevención es fundamental.
Técnicas, procedimientos y métodos diagnósticos
Salvo que se presenten enfermedades graves que requieran un estudio más exhaustivo, la evaluación de los pacientes geriátricos se centra en su estado general de salud y en la valoración de su capacidad cognitiva. Para que las personas mayores se sientan cómodas y confíen en el especialista, se suelen utilizar métodos sencillos, pero muy eficaces:
- Anamnesis: método clínico en el que se pregunta al paciente por sus antecedentes médicos y familiares, así como por su situación social y su entorno ambiental.
- Auscultación pulmonar y cardiaca: técnica recomendada en todas las visitas para detectar soplos, sibilancias o ruidos cardiacos y respiratorios.
- Palpación: examen que se realiza mediante el tacto como método diagnóstico para detectar anomalías en determinados órganos, como el apéndice, el estómago, el bazo o el hígado.
- Percusión: consiste en dar pequeños golpes en el cuerpo para determinar el tamaño y la consistencia de los órganos.
Enfermedades y síntomas
Principales patologías y enfermedades
La mayor dificultad que presentan los pacientes de geriatría es que suelen ser pluripatológicos o enfermos crónicos. Entre las principales afecciones que se tratan en la consultan están:
- Neumonía
- Alzheimer
- Ictus
- Artrosis
- Diabetes
- Artritis reumatoide
- Parkinson
- Enfermedad pulmonar obstructiva crónica (EPOCEnfermedad pulmonar obstructiva crónica (EPOC))Enfermedad pulmonar )
- Osteoporosis
- Demencia senil
Síntomas relacionados
Los pacientes que acuden a la consulta de geriatría tienen unas características concretas y presentan síntomas como:
- Más de una enfermedad a la vez
- Prescripción de varios tratamientos farmacológicos
- Signos de fragilidad
- Riesgo de dependencia
- Problemas sociales derivados de su edad
- Disminución de las reservas fisiológicas
- Deterioro cognitivo
- Trastornos de la marcha
- Dolor crónico
- Incontinencia
- Malnutrición
Sobre la consulta de geriatría
Al especializarse en tratar a pacientes mayores de 65 años y en el proceso de envejecimiento, la consulta con el geriatra es más rápida y el diagnóstico más eficaz que si se continúa acudiendo al médico de atención primaria. Por lo tanto, es recomendable pedir cita cuando se llega a esta edad.
¿Qué debes tener en cuenta?
Durante la primera consulta, el geriatra habla con el paciente para conocer su estado de salud general, las patologías que tiene y los tratamientos que sigue. Esta conversación, además, le ayuda a detectar posibles dificultades cognitivas o mentales.
Es conveniente acudir a la cita acompañado de un familiar o de una persona de confianza que aporte nueva información. Es habitual que el médico dedique tiempo a resolver dudas o a dar consejos de cuidado cuando sea necesario.
¿Qué debo llevar a la consulta?
Para que el geriatra tenga la mayor información posible, se recomienda llevar un listado con los medicamentos que se toman y con las enfermedades que se tengan diagnosticadas. Además, se deben anotar los nuevos síntomas que se hayan manifestado y cualquier duda de salud que se tenga.

Si tienes más dudas ponte en contacto con nosotros en el teléfono de Atención al Paciente: 900 301 013