Biopsia testicular

La biopsia testicular es un procedimiento diagnóstico mediante el cual se extrae una muestra del tejido del interior del testículo para analizarlo al microscopio. La extracción se realiza o bien mediante punción y aspiración con aguja o bien mediante una resección quirúrgica.

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Descripción General

La biopsia testicular es un procedimiento diagnóstico que consiste en la extracción de una o varias muestras de tejido de uno o ambos testículos para su posterior análisis al microscopio.

Existen dos técnicas distintas para realizar una biopsia testicular:

  • Biopsia testicular abierta: se utiliza cuando se necesita extraer una muestra de gran tamaño.
  • Biopsia testicular percutánea o aspiración testicular: es un procedimiento menos invasivo que extrae muestras de menor tamaño. En muchos casos, es el paso previo antes de la biopsia abierta.

¿Cuándo está indicada?

El objetivo principal de una biopsia testicular es identificar la causa de la infertilidad masculina, ya que proporciona información detallada de la capacidad del testículo para producir espermatozoides. Así, permite identificar la causa subyacente de las siguientes patologías:

  • Azoospermia obstructiva: los conductos seminales están bloqueados e impiden la salida del semen al exterior.
  • Azoospermia secretora: no hay producción de espermatozoides o estos no finalizan su proceso de maduración.

La biopsia testicular abierta, por su parte, es utilizada también para la extracción de espermatozoides en técnicas de reproducción asistida como la fecundación in vitro (FIV). Además, la muestra obtenida también se puede utilizar para realizar un estudio cromosómico y genético de los espermatozoides.

Por tanto, es una prueba que suele indicarse en los siguientes casos:

  • Pacientes con bajo o nulo recuento de espermatozoides en un seminograma que no es debido a trastornos hormonales.
  • Pacientes con vasectomía previa que quieren tener descendencia.

¿Cómo se realiza?

Una biopsia testicular abierta se realiza practicando una incisión de unos dos o tres centímetros en el escroto para exponer el testículo y extraer pequeñas porciones de tejido. Las muestras suelen fraccionarse en el laboratorio: una parte se utiliza para la recuperación de espermatozoides viables (que, una vez obtenidos, se congelan en nitrógeno líquido) y la otra, para diagnosticar la causa de la infertilidad.

En la biopsia percutánea se practica una punción en el testículo con una aguja fina y se aspiran las muestras de tejido. Este es el método habitual cuando hay una azoospermia obstructiva o el paciente se ha realizado una vasectomía pero se cree que sigue habiendo producción espermática. Es un procedimiento menos agresivo pero tiene el inconveniente de recoger menos material, ofrecer un diagnóstico menos preciso y producir más efectos secundarios.

Riesgos

Aunque leves e infrecuentes, la biopsia testicular no está exenta de posibles complicaciones:

  • Sangrado excesivo.
  • Hematoma cutáneo en el escroto.
  • Hematoma intratesticular: se manifiesta con dolor persistente, aunque responde a los analgésicos comunes y se reabsorbe por sí solo en unos días.
  • Infección en la incisión.
  • Tumefacción testicular: remite con analgésicos y antiinflamatorios.

Qué esperar de una biopsia testicular

Una biopsia abierta suele realizarse en un quirófano, con el paciente acostado boca arriba sobre la mesa de exploraciones. Antes del procedimiento, se le administra un sedante. La piel donde se va a practicar la incisión se esteriliza, se cubre la zona que la rodea con un paño estéril y se inyecta anestesia local en la zona (en ocasiones, puede ser necesaria la anestesia general). Durante la incisión y la toma de muestras, es posible notar presión o una sensación similar a un pinchazo. La incisión se cierra con puntos de sutura y se cubre con un apósito. La intervención dura entre 15 y 20 minutos. Una vez finalizada, el paciente es trasladado a la sala de recuperación, donde reposa unas dos o tres horas hasta que desaparece el efecto de la sedación.

En una biopsia por punción también es necesario esterilizar la zona y administrar anestesia local antes de insertar la aguja. Este procedimiento en más rápido y sencillo. Al no utilizar sedación, no es necesario que el paciente permanezca en observación.

Se trata de procedimientos ambulatorios que no necesitan ingreso hospitalario. Una vez en casa, es recomendable guardar reposo relativo y no mantener relaciones sexuales durante los días posteriores.

Especialidades en las que se solicita la biopsia testicular

La biopsia testicular se solicita en las consultas de urología y reproducción asistida.

Cómo prepararse

La biopsia testicular no necesita una preparación específica. Solo es necesario firmar el formulario de consentimiento e informar al médico si se toman fármacos anticoagulantes, en cuyo caso posiblemente se suspendan unos días antes de la biopsia porque aumentan el riesgo de sangrado.