Gonorrea
¿Son diferentes los síntomas de la gonorrea en mujeres y hombres? Todo sobre las formas de contagio y los tratamientos de esta enfermedad.
Síntomas y causas
La gonorrea es una enfermedad de transmisión sexual provocada por la bacteria Neisseria gonorrhoeae (gonococo) que afecta tanto a hombres como a mujeres. La infección gonocócica se contrae principalmente cuando se mantienen relaciones sexuales vaginales, anales u orales sin preservativo con una persona contagiada.
Dependiendo de la parte del cuerpo afectada, se describen distintos tipos de gonorrea:
- Gonorrea oral: afecta a la boca y la garganta.
- Gonorrea genital: se presenta en el pene, la vulva o la vagina.
- Gonorrea anal: puede darse en el ano o el recto.
- Conjuntivitis gonocócica: cuando la gonorrea afecta a los ojos. Es habitual en los casos en los que la madre contagia al bebé en el momento de nacer.
Con los tratamientos antibióticos actuales, la gonorrea remite en poco tiempo. No obstante, si no se detecta a tiempo o no se siguen las pautas médicas, puede derivar en problemas de salud más serios como la infertilidad o determinadas disfunciones sexuales.
Síntomas
Los síntomas de la gonorrea varían dependiendo del tipo y del sexo de la persona contagiada.
- Síntomas de gonorrea genital en las mujeres: según datos del Ministerio de Sanidad
, más del 50 % de las afectadas permanecen asintomáticas. Cuando se presentan, destacan los siguientes signos:
- Ardor al orinar.
- Cambios en el color, el olor o la cantidad de flujo vaginal.
- Sangrado entre reglas.
- Dolor o malestar abdominal.
- Síntomas de gonorrea genital en los hombres: solo el 10 % de los contagiados es asintomático, por lo que la mayoría manifiestan:
- Ardor al orinar.
- Secreción blanquecina, amarillenta o verdosa por el pene.
- Dolor o inflamación de los testículos.
- Síntomas de gonorrea anal:
- Dolor, especialmente al defecar.
- Sangrado.
- Secreciones purulentas.
- Síntomas de gonorrea oral: son poco frecuentes.
- Inflamación de los ganglios linfáticos del cuello.
- Dolor de garganta.
- Síntomas de conjuntivitis gonocócica:
- Enrojecimiento de los ojos.
- Dolor ocular.
- Lagrimeo.
- Úlceras.
Causas
El gonococo es el causante de la gonorrea. La transmisión de la bacteria Neisseria gonorrhoeae se produce al entrar en contacto con los genitales o los fluidos corporales de una persona infectada.
Factores de riesgo
El riesgo de contraer gonorrea aumenta en los siguientes casos:
- Mantener relaciones sexuales sin preservativo.
- Tener más de una pareja sexual.
- Practicar sexo con una persona infectada.
Complicaciones
Cuando la gonorrea no se trata adecuadamente, pueden surgir las siguientes complicaciones:
- Enfermedad inflamatoria pélvica (EIP): infección en el útero, los ovarios o las trompas de Falopio.
- Infertilidad: en las mujeres, es la consecuencia de la EIP, mientras que en los hombres se produce por una inflamación del epidídimo (conducto que transporta el esperma).
- Gonorrea en otras partes del cuerpo: el gonococo se disemina a través de la sangre y llega hasta las articulaciones o la piel.
- SIDA y VIH: padecer o haber padecido gonorrea aumenta el riesgo de contraer el virus de la inmunodeficiencia humana o el síndrome de inmunodeficiencia adquirida.
- Ceguera: en los niños con gonorrea ocular.
Prevención
La gonorrea puede prevenirse con las siguientes recomendaciones:
- Utilizar preservativos en todas las relaciones sexuales.
- Evitar el contacto sexual con personas infectadas.
- Mantener relaciones monógamas.
¿Qué médico trata la gonorrea?
Los especialistas en Dermatología Médico-Quirúrgica y Venereología, Ginecología y Obstetricia y Urología diagnostican y tratan la gonorrea.
Diagnóstico
Para diagnosticar la gonorrea, se siguen los siguientes pasos:
- Anamnesis: es fundamental conocer los antecedentes y los hábitos sexuales del paciente.
- Examen físico: consiste en la palpación o en el uso de un espéculo (en el caso de las mujeres con indicios de gonorrea vaginal).
- Pruebas moleculares: la OMS recomienda este tipo de análisis para confirmar las sospechas de infección por gonococo. Para ello, se analizan muestras de tejido o de fluidos en busca de la presencia de la bacteria Neisseria gonorrhoeae.
Tratamiento
Al tratarse de una infección bacteriana, la gonorrea se trata con antibióticos. Es fundamental que se sigan las indicaciones ofrecidas por el médico, ya que se han detectado algunos casos en los que el gonococo se ha hecho resistente a la medicación debido a un uso inadecuado de este tipo de fármacos. Además, es preciso informar a las parejas sexuales actuales y pasadas para que se traten si también están contagiadas.
