Cultivo del exudado faríngeo

El cultivo del exudado faríngeo se utiliza para detectar enfermedades otorrinolaringológicas, especialmente aquellas provocadas por virus y bacterias.

Prueba de laboratorioPrueba de laboratorio

Descripción General

El cultivo del exudado faríngeo es un estudio para determinar la presencia de una infección en la faringe. Para hacerlo, se toma una muestra de los fluidos presentes en la parte posterior de la garganta y se observan en el laboratorio en busca de hongos o bacterias.

Las enfermedades que más habitualmente se diagnostican mediante un cultivo del exudado faríngeo son las y las faringitis, normalmente provocadas por el Estreptococo del Grupo A, aftas causadas por la Candida albicans o la escarlatina.

¿Cuándo está indicado?

El exudado faríngeo se realiza en pacientes con síntomas de infección, como dolor de garganta y fiebre. Es un método útil para determinar si la infección es viral o bacteriana, ya que sus tratamientos son diferentes.

¿Cómo se realiza?

La toma de muestras del exudado faríngeo se hace con el paciente sentado o de pie, con la cabeza ligeramente inclinada hacia atrás y la boca muy abierta. Para facilitar el proceso, se utiliza un depresor para bajar la lengua. Después, se introduce un hisopo con un algodón limpio en la punta y se frota en las paredes de la garganta, incidiendo en las zonas enrojecidas o con alguna lesión. Es importante evitar recoger restos de saliva o moco, ya que podrían desvirtuar los resultados.

Una vez se ha tomado la muestra, se introduce el hisopo en un tubo con tapón de rosca y se envía al laboratorio a una temperatura de 4°C. Si el cultivo se va a llevar a cabo en un periodo superior a 48 o 72 horas, debe congelarse a una temperatura inferior a -80°C. Según la OMS, la seguridad durante el transporte se basa en el uso de un sistema de embalaje triple básico:

  • Recipiente primario que contiene la muestra (el tubo con tapón de rosca) envuelto en material absorbente.
  • Envase secundario irrompible, estanco y con cierre hermético.
  • Embalaje exterior amortiguado para la expedición, cuando sea necesario.

En el laboratorio, se extiende la muestra frotando suavemente el hisopo sobre la superficie del medio de cultivo y se coloca en un dispositivo con una temperatura similar a la del cuerpo humano y una cantidad de dióxido de carbono que propicia el desarrollo bacteriano. La muestra se mantiene en el incubador durante unas 18 o 24 horas. Finalmente, se observa el resultado en el microscopio o se aplican pruebas bioquímicas para identificar los hongos o las bacterias.

Riesgos

El cultivo del exudado faríngeo no supone un riesgo para el paciente.

Qué esperar de un cultivo de exudado faríngeo

La toma de muestras para el cultivo del exudado faríngeo puede provocar arcadas mientras se pasa el hisopo por la garganta. Algunos pacientes refieren un dolor leve en este momento. Una vez que se ha recogido el material necesario, se puede retomar la rutina de forma inmediata.

Los resultados se comunican en una consulta una vez transcurridos dos o tres días, aunque si hay presencia de hongos puede demorarse hasta los siete días. En este momento, se prescribe el tratamiento adecuado.

Especialidades en las que se solicita un cultivo de exudado faríngeo

El frotis faríngeo se estudia en el laboratorio por los patólogos o los especialistas en análisis clínicos. Esta prueba se solicita habitualmente por parte de los otorrinolaringólogos, los médicos de familia, los pediatras o los expertos en enfermedades infecciosasEnfermedades infecciosasEnfermedades infecciosas .

Cómo prepararse

No se precisa una preparación especial antes de un frotis faríngeo.