Prueba del VPH

La prueba del VPH confirma o descarta la presencia del virus del papiloma humano. En pacientes mujeres, el procedimiento consiste en extraer y analizar una muestra de las células del cuello uterino. En pacientes hombres, se identifican las lesiones externas producidas por el VPH mediante la aplicación de una solución especial.

Prueba de laboratorioPrueba de laboratorio

Descripción General

La prueba del VPH sirve para detectar la presencia de los tipos de riesgo del virus del papiloma humano, una de las infecciones de transmisión sexual (ITS) más comunes. Existen más de 200 variedades de VPH, pero solo unos 40 se transmiten por vía sexual. Aunque la mayoría de sus tipos son inofensivos, no causan síntomas y desaparecen por sí mismos, algunas variantes del virus sí son peligrosas:

  • Virus del papiloma humano de bajo riesgo oncológico: incluyen los tipos 6 y 11, los que con más frecuencia causan condilomas, o verrugas, en los genitales, el ano, la boca o la garganta.
  • Virus del papiloma humano de alto riesgo oncológico: entre ellos se encuentran los tipos 16 y 18, el factor de riesgo más importante del cáncer de cuello uterino (cáncer cervical). Este grupo también está relacionado con el cáncer de vulva, de vagina, de pene, de ano y con algunos tipos de cáncer de boca y garganta.

Las pruebas de detección del VPH se realizan en mujeres. No existe un test específico que pueda detectar el VPH de riesgo en hombres, aunque sí es posible realizar una prueba que identifique las lesiones subclínicas producidas por el VPH.

¿Cuándo está indicada?

Se suele indicar un test del VPH en los siguientes casos:

  • Resultados anómalos en una citología vaginal: aparición de células escamosas atípicas.
  • Pacientes a cuya pareja sexual se le diagnosticó VPH.
  • Presencia de condilomas genitales.
  • Mujeres de entre 25 y 65 años: es recomendable realizarse la prueba de forma periódica, cada cinco años.
  • Personas con VIH o con el sistema inmunitario comprometido: son más propensas a contagiarse.
  • Mujeres con antecedentes de cáncer de cuello uterino.

¿Cómo se realiza?

La prueba de detección del VPH es similar a una citología vaginal, y ambas pruebas suelen realizarse en conjunto. Primero, se introduce en la vagina un instrumento denominado espéculo, que separa las paredes vaginales para facilitar la visualización del cuello uterino. Después, se toman muestras de las células del cuello uterino utilizando un pequeño cepillo, un hisopo o una espátula. La muestra es analizada posteriormente en el laboratorio para detectar la presencia del virus.

En el caso de los hombres, se realiza un procedimiento llamado penescopia, o citología uretral. Consiste en aplicar una gasa empapada en una solución de ácido acético sobre el pene, envolviéndolo y dejándolo actuar durante unos minutos. Después se retira la gasa y se observa el pene con una lente de aumento. Las lesiones subclínicas del VPH, no visibles en condiciones normales, reaccionan al ácido y se muestran blanquecinas, evidenciando la infección. Si el resultado es positivo, el siguiente paso es realizar una biopsia.

Riesgos

El test del papiloma humano es una prueba sencilla y segura que no supone ninguna complicación. No obstante, como en cualquier prueba de detección, existe un mínimo riesgo de obtener un falso negativo o un falso positivo. Un falso positivo puede derivar en la aplicación de procedimientos adicionales innecesarios, mientras que un falso negativo puede retrasar el diagnóstico y, consecuentemente, el tratamiento.

Qué esperar de una prueba del VPH

Antes de comenzar, la paciente se quita la ropa de la parte inferior del cuerpo y se coloca sobre la camilla con las piernas levantadas y colocadas sobre los estribos. El test de VPH no es una prueba dolorosa, pero es posible notar molestias o una sensación de presión tanto cuando se introduce el espéculo como cuando se recogen las muestras. También es posible experimentar después un sangrado muy leve.

En una penescopia, por su parte, es probable notar un escozor al aplicar el ácido acético, especialmente si se aplica sobre el escroto, ya que su piel es muy sensible a los productos químicos.

Ambas pruebas son procedimientos ambulatorios de muy corta duración, tras los cuales el paciente puede volver a sus actividades normales sin problema.

Especialidades en las que se solicita la prueba del VPH

La prueba del VPH se solicita en las consultas de ginecología y obstetricia y urología.

Cómo prepararse

Es preferible no programar la prueba durante el periodo menstrual, ya que la menstruación puede afectar a la calidad de la muestra recogida. Además, dos días antes de la prueba, se deben evitar las relaciones sexuales y el uso de tampones, medicamentos, cremas y geles vaginales.

Si se trata de una penescopia, también se deben evitar las relaciones sexuales y el uso de cremas genitales durante los dos días previos.