Quirónsalud
Blog del equipo del Dr. Meneu, Jefe de Servicio de Cirugía General y del Aparato Digestivo del CH Ruber Juan Bravo
Dr. Pietro Giordano
¿Qué es?
La obstrucción intestinal se define como el bloqueo total o parcial del tránsito intestinal, afectando al paso de los alimentos, las heces y los gases.
Puede producirse en cualquier segmento del intestino delgado o grueso; el segmento intestinal que queda por encima de la obstrucción continúa funcionando, dilatándose a medida que se va llenando de alimentos, líquidos y secreciones digestivas.
Sin embargo, hay que distinguir el íleo paralítico, definido también como pseudobstrucción, donde el intestino no funciona de manera correcta, sin que exista un problema mecánico, normalmente como consecuencia de una cirugía abdominal, gastroenteritis o trastornos de los electrolitos.
Las causas
Las causas mecánicas de la obstrucción intestinal difieren según la edad de la persona y la localización de la obstrucción.
En edad pediátrica, la obstrucción intestinal suele estar causada por un defecto congénito (atresia intestinal), una masa dura de contenido intestinal (síndrome del tapón de meconio), una torsión de un asa intestinal (vólvulo) o la invaginación de un segmento de intestino dentro de otro (invaginación intestinal o intususcepción).
Sin embargo, en edad adulta, las dos principales causas de obstrucción de intestino delgado son las adherencias (bandas de tejido cicatricial derivado de cirugías abdominales previas) y las hernias (partes del intestino que protruyen por una abertura de la pared abdominal). La obstrucción del primer segmento del intestino delgado (duodeno) puede ser causada por un cáncer de páncreas, la cicatización patológica derivada de una úlcera o la enfermedad de Crohn. La obstrucción del intestino grueso suele estar causada principalmente por tumores (el cáncer colorrectal), menos frecuentemente diverticulitis o una masa dura de materia fecal (fecaloma).
Síntomas y diagnóstico
Son síntomas frecuentes el dolor de tipo cólico, la distensión abdominal, los vómitos (frecuentes en las obstrucciones del intestino delgado, empiezan más tarde en las obstrucciones del intestino grueso) y la ausencia de evacuaciones de gases y/o heces.
El dolor intenso y constante y la fiebre son síntomas de gravedad, particularmente como consecuencia de una posible perforación de la pared intestinal.
El diagnóstico se basa en los resultados de la exploración física y de las pruebas de imagen.
La radiografía simple de abdomen puede distinguir la dilatación de asas intestinales de delgado frente la dilatación del marco cólico, valorando la posible localización de la obstrucción; la TC (tomografía computerizada) del abdomen se utiliza para obtener una mejor imagen del intestino e identificar el lugar exacto y, sobre todo, la causa de la obstrucción.
Tratamiento
La obstrucción intestinal requiere ingreso hospitalario con la colocación de una vía intravenosa para administrar líquidos y electrolitos, para rehidratar y reponer sales tras los vómitos. Se administran antibióticos vía intravenosa si hay riesgo de isquemia o infección.
Se coloca una sonda nasogástrica, larga y fina a través de la nariz hasta alcanzar el estómago, para extraer aire y fluidos con el objetivo de aliviar la distensión del abdomen.
En la mayoría de los casos, si la causa es una adherencia, puede que sea necesario solo el tratamiento conservador (ayuno, reposición de líquidos, analgesia, sonda nasogástrica). Sin embargo, tras una atenta valoración médica, el tratamiento es quirúrgico, cuando:
Si no se trata puede producir consecuencias importantes, incluso fatales, como una perforación intestinal.
Las técnicas quirúrgicas pueden incluir la adhesiolis (sección simple de las bridas), la resección intestinal (extirpación de la parte dañada del intestino), colocar un "stent" metálico autoexpandible (en el cáncer de colon) o una colostomía/ileostomía (derivación temporal o permanente del contenido del íleo o del colon a través de la pared abdominal).
Prevención
No existen unas pautas sólidas para prevenir la obstrucción intestinal; desde luego, una dieta saludable y equilibrada, rica en fibra, evitando el alcohol y el tabaco y haciendo ejercicio regular además de realizar una correcta ingesta de líquidos, son unas medidas saludables que pueden ayudar a la prevención del bloqueo del tránsito intestinal.
En caso de una obstrucción intestinal, se recomienda seguir durante los primeros días tras la recuperación del tránsito, una dieta de líquidos con caldos y gelatinas.
En caso de clínica, es obligatoria la valoración por parte de un médico; se recomienda seguir las pautas de control y screening del cáncer colorrectal, sobre todo en caso de antecedentes familiares, alteraciones del tránsito intestinal de nueva aparición, cambios del aspecto de las heces, sangre con las deposiciones.
Puntos clave
Gracias por su comentario Martha.
Consulte sus dudas con su cirujano, que es quien mejor conoce las circunstancias de su proceso y quien mejor podrá resolverlas.
Un saludo,
Gracias por su comentario Almudena.
Como puede comprender este Blog no puede sustituir a una consulta médica, por lo que emitir una opinión sin conocer las circunstancias de su proceso sería poco prudente, además de poco oportuno.
Siga las recomendaciones de su médico.
Un saludo,
Bienvenido al blog del Servicio de Cirugía General y del Aparato Digestivo del Complejo Hospitalario Ruber Juan Bravo. Este espacio está creado para aconsejar e informar sobre las enfermedades del aparato digestivo, de la cirugía general, de la cirugía laparoscópica, de la cirugía robótica, de la cirugía de la carcinomatosis, de la cirugia endocrina, de la cirugía metabólica y de la obesidad, de la cirugía de colon y de recto y de la proctología, ademas de la cirugía oncológica, entre otros aspectos. El cáncer del aparato digestivo es una de las principales causa de muerte en todo el mundo. Estamos abiertos a responder a cualquier duda o cuestión. Será un placer intentar resolverla.
La finalidad de este blog es proporcionar información de salud que, en ningún caso sustituye la consulta con su médico. Este blog está sujeto a moderación, de manera que se excluyen de él los comentarios ofensivos, publicitarios, o que no se consideren oportunos en relación con el tema que trata cada uno de los artículos.
Quirónsalud no se hace responsable de los contenidos, opiniones e imágenes que aparezcan en los "blogs". En cualquier caso, si Quirónsalud es informado de que existe cualquier contenido inapropiado o ilícito, procederá a su eliminación de forma inmediata.
Los textos, artículos y contenidos de este BLOG están sujetos y protegidos por derechos de propiedad intelectual e industrial, disponiendo Quirónsalud de los permisos necesarios para la utilización de las imágenes, fotografías, textos, diseños, animaciones y demás contenido o elementos del blog. El acceso y utilización de este Blog no confiere al Visitante ningún tipo de licencia o derecho de uso o explotación alguno, por lo que el uso, reproducción, distribución, comunicación pública, transformación o cualquier otra actividad similar o análoga, queda totalmente prohibida salvo que medie expresa autorización por escrito de Quirónsalud.
Quirónsalud se reserva la facultad de retirar o suspender temporal o definitivamente, en cualquier momento y sin necesidad de aviso previo, el acceso al Blog y/o a los contenidos del mismo a aquellos Visitantes, internautas o usuarios de internet que incumplan lo establecido en el presente Aviso, todo ello sin perjuicio del ejercicio de las acciones contra los mismos que procedan conforme a la Ley y al Derecho.