Quirónsalud

Saltar al contenido

Blog del Sº Endocrino. H.U. Quirónsalud Madrid, Ruber Juan Bravo, San José y Tres Cantos

  • La importancia de consultar a un nutricionista antes y después de una cirugía bariátrica

    Obesidad mórbidaObesidad mórbida

    La cirugía bariátrica se ha convertido en una opción popular y efectiva para el tratamiento de la obesidad severa y las enfermedades relacionadas con el peso. Sin embargo, el éxito de esta intervención quirúrgica no solo depende del procedimiento en sí, sino también de un plan de nutrición adecuado antes y después de la operación.

    La importancia del nutricionista antes de la cirugía

    1. Evaluación nutricional integral.

    Antes de la cirugía, un nutricionista realizará una evaluación nutricional completa para determinar el estado de salud del paciente. Esto incluye la identificación de deficiencias nutricionales existentes y el establecimiento de metas realistas de pérdida de peso antes del procedimiento. Un estado nutricional óptimo puede reducir el riesgo de complicaciones durante y después de la cirugía.

    2. Preparación para introducir cambios en la dieta.

    La cirugía bariátrica implica cambios drásticos en la forma en que el cuerpo procesa los alimentos. Un nutricionista ayuda a preparar al paciente para estos cambios al diseñar un plan de alimentación preoperatorio que promueva la pérdida de peso inicial y minimice el tamaño del hígado, lo cual facilita la cirugía.

    Este plan generalmente incluye:

    • Reducción de calorías: fomentar la pérdida de peso inicial para mejorar los resultados quirúrgicos.
    • Alimentos ricos en proteínas: asegurar un consumo adecuado de proteínas para mantener la masa muscular.
    • Educación sobre porciones: enseñar a los pacientes cómo reducir las porciones de alimentos gradualmente.

    3. Establecimiento de expectativas realistas.

    El nutricionista también trabaja con el paciente para establecer expectativas realistas sobre la pérdida de peso y el cambio en el estilo de vida. Esto incluye la discusión sobre cómo la cirugía afectará los hábitos alimenticios y la importancia de la adherencia a un plan de alimentación a largo plazo.

    La importancia del nutricionista después de la cirugía

    1. Plan de alimentación personalizado.

    Después de la cirugía, la dieta del paciente cambiará drásticamente y pasará por diferentes fases:

    • Líquidos claros: durante los primeros días, se consumen solo líquidos claros para permitir que el sistema digestivo sane.
    • Líquidos completos y purés: la dieta evoluciona hacia líquidos completos y purés suaves para facilitar la transición a sólidos.
    • Alimentos blandos y sólidos: gradualmente, se reintroducen alimentos blandos y sólidos en la dieta.

    Un nutricionista guía al paciente a través de estas fases, asegurando que se cumplan los requisitos nutricionales y evitando complicaciones como la deshidratación y la desnutrición.

    2. Monitoreo de deficiencias nutricionales.

    Después de la cirugía bariátrica, la absorción de nutrientes puede verse afectada, lo que aumenta el riesgo de deficiencias nutricionales. El nutricionista realizará un seguimiento regular para evaluar los niveles de vitaminas y minerales y recomendará suplementos según sea necesario. Algunos nutrientes críticos a monitorear incluyen:

    • Vitamina B12
    • Hierro
    • Calcio
    • Vitamina D

    3. Apoyo emocional y conductual.

    El cambio en la dieta y el estilo de vida puede ser desafiante desde el punto de vista emocional y psicológico. Un nutricionista no solo brinda apoyo nutricional, sino también orientación para desarrollar una relación saludable con los alimentos, identificar desencadenantes emocionales de la alimentación y fomentar hábitos alimenticios sostenibles.

    4. Mantenimiento de la pérdida de peso.

    El objetivo a largo plazo después de la cirugía bariátrica es mantener la pérdida de peso y mejorar la salud general. Un nutricionista trabaja con el paciente para establecer un plan de alimentación equilibrado que apoye la pérdida de peso continua y prevenga el aumento de peso. Esto incluye:

    • Planificación de comidas balanceadas
    • Incorporación de actividad física
    • Establecimiento de objetivos a largo plazo

    La consulta con un nutricionista antes y después de la cirugía es esencial para asegurar que los pacientes reciban el apoyo y la orientación necesarios para lograr una pérdida de peso exitosa y sostenible. Un nutricionista no solo ayuda a optimizar los resultados quirúrgicos, sino que también empodera a los pacientes para que adopten un estilo de vida saludable y mantengan sus logros a largo plazo.

    Si estás considerando la cirugía bariátrica o ya has pasado por el procedimiento, asegúrate de trabajar con un nutricionista calificado para maximizar tus posibilidades de éxito y bienestar general.

  • Diferencias entre alergia a la leche e intolerancia a la lactosa

    La alergia a la leche en realidad es una alergia a la proteína de la leche de vaca, mientras que la intolerancia a la lactosa es la dificultad para absorber el azúcar presente en la leche llamado lactosa.

    Alergia lecheAlergia leche

    La alergia a la leche es una afección que suele darse por la fracción proteica de la leche. La leche de vaca es la causa usual de alergia a la leche, pero la leche de oveja, cabra, búfala y otros mamíferos también puede causar esta reacción.

    La intolerancia, por su parte, se da directamente por el hidrato de carbono o azúcar de la leche, llamada lactosa, que a su vez está compuesta por glucosa y galactosa (son moléculas simples).

    Lo que ocurre en la intolerancia a la lactosa es que el cuerpo no produce una enzima encargada de permitir su ruptura y absorción.

    La principal diferencia entre la alergia y la intolerancia a la leche radica en su origen. La alergia es una reacción del sistema inmunológico del cuerpo, mientras que en la intolerancia no hay respuesta inmune involucrada. Además, es importante destacar que las alergias son menos comunes que las intolerancias.

    Otra distinción clave es que cada condición se desencadena por diferentes componentes de la leche: la alergia suele ser provocada por las proteínas de la leche, mientras que la intolerancia está relacionada con el azúcar, específicamente la lactosa.

    El tratamiento para estas dos condiciones también varía. Los síntomas comunes de la intolerancia a las proteínas de la leche o a la lactosa incluyen problemas digestivos como hinchazón, gases y diarrea tras el consumo de productos lácteos.

    Si ya cuentas con un diagnóstico médico de alguna de estas afecciones, es fundamental que revises las etiquetas no solo de los alimentos, sino también de los medicamentos que consumes. Mantener una dieta adecuada es esencial para tu bienestar. Por ello, parte del tratamiento debe ser guiado por un nutricionista, quien podrá diseñar un plan alimenticio adaptado a tus necesidades individuales.

    Recuerda que cuidar tu salud comienza con una buena información y atención profesional. ¡No dudes en buscar ayuda!

  • Alimentación y SIBO: ¿Cómo puede ayudar la dieta?

    SIBOSIBO

    La dieta juega un papel fundamental en el manejo del SIBO. Una alimentación adecuada puede ayudar a controlar los síntomas y mejorar la salud intestinal. A continuación, te presentamos algunas estrategias dietéticas recomendadas:

    1. Dieta Baja en FODMAPs

    Los FODMAPs son un grupo de carbohidratos fermentables que pueden causar síntomas digestivos en personas con SIBO. Una dieta baja en FODMAPs puede ayudar a reducir la producción de gases y la hinchazón. Algunos ejemplos de alimentos altos en FODMAPs incluyen:

    • Legumbres y algunas verduras como el ajo y la cebolla
    • Frutas como la manzana y la pera
    • Productos lácteos que contienen lactosa

    2. Dieta Específica de Carbohidratos (SCD)

    La SCD es una dieta que elimina carbohidratos complejos y azúcares refinados, limitando las fuentes de alimentos que alimentan a las bacterias en el intestino delgado. Se centra en alimentos naturales y no procesados, como frutas, verduras, carnes y nueces.

    3. Dieta Paleo

    La dieta Paleo se basa en el consumo de alimentos enteros y no procesados, similar a lo que comían nuestros ancestros. Elimina granos, lácteos y alimentos procesados, lo que puede ayudar a reducir la inflamación y mejorar la salud intestinal.

    4. Suplementación y Protocolo de Tratamiento

    Además de la dieta, el tratamiento del SIBO puede incluir el uso de antibióticos, probióticos y suplementos específicos. Es importante trabajar con un profesional de la salud para desarrollar un plan de tratamiento adecuado que incluya:

    • Antibióticos: Medicamentos específicos para reducir el sobrecrecimiento bacteriano.
    • Probióticos: Ayudan a restaurar el equilibrio de bacterias beneficiosas en el intestino.
    • Enzimas digestivas: Pueden mejorar la digestión y absorción de nutrientes.
    • Consejos Prácticos para Manejar el SIBO
    • Comer despacio y masticar bien: Esto ayuda a la digestión y reduce el riesgo de fermentación en el intestino delgado.
    • Evitar comidas copiosas: Opta por comidas pequeñas y frecuentes para facilitar la digestión.
    • Mantenerse hidratado: El agua es esencial para una buena digestión y salud intestinal.
    • Consultar a un especialista: Un nutricionista o gastroenterólogo puede ofrecer un plan personalizado y adaptado a tus necesidades específicas.

    El manejo del SIBO requiere un enfoque integral que combine cambios en la dieta, tratamiento médico y ajustes en el estilo de vida. Al entender cómo los alimentos impactan en el intestino, puedes tomar medidas informadas para reducir los síntomas y mejorar tu bienestar general. Recuerda que cada persona es única, por lo que es fundamental consultar a un profesional de la salud antes de realizar cambios drásticos en la dieta.

Buscador de Hablemos de Nutrición
Sobre este blog

Blog de las Nutricionistas del Servicio de Endocrinología del Dr. Jodar que te descubrirán un mundo de contenidos sobre nutrición saludable, hábitos de vida sana y promoción de la dieta mediterránea.

Archivo del blog

La finalidad de este blog es proporcionar información de salud que, en ningún caso sustituye la consulta con su médico. Este blog está sujeto a moderación, de manera que se excluyen de él los comentarios ofensivos, publicitarios, o que no se consideren oportunos en relación con el tema que trata cada uno de los artículos.

Quirónsalud no se hace responsable de los contenidos, opiniones e imágenes que aparezcan en los "blogs". En cualquier caso, si Quirónsalud es informado de que existe cualquier contenido inapropiado o ilícito, procederá a su eliminación de forma inmediata.

Los textos, artículos y contenidos de este BLOG están sujetos y protegidos por derechos de propiedad intelectual e industrial, disponiendo Quirónsalud de los permisos necesarios para la utilización de las imágenes, fotografías, textos, diseños, animaciones y demás contenido o elementos del blog. El acceso y utilización de este Blog no confiere al Visitante ningún tipo de licencia o derecho de uso o explotación alguno, por lo que el uso, reproducción, distribución, comunicación pública, transformación o cualquier otra actividad similar o análoga, queda totalmente prohibida salvo que medie expresa autorización por escrito de Quirónsalud.

Quirónsalud se reserva la facultad de retirar o suspender temporal o definitivamente, en cualquier momento y sin necesidad de aviso previo, el acceso al Blog y/o a los contenidos del mismo a aquellos Visitantes, internautas o usuarios de internet que incumplan lo establecido en el presente Aviso, todo ello sin perjuicio del ejercicio de las acciones contra los mismos que procedan conforme a la Ley y al Derecho.